¿Cuáles son los mejores bancos de sonido y música libres de derechos?
Hay una gran cantidad de bibliotecas de música y sonido libres de derechos entre las que puede elegir. ¡Pero para eso todavía necesitas saber dónde buscarlos! Los bancos de sonido, audio y música son entonces una de las mejores soluciones. Si no sabes cuáles son los mejores en el campo, ¡descubre nuestro artículo!
Resumen
1 – Cama musical
Musicbed es un gran recurso para música libre de derechos. La biblioteca ofrece una amplia gama de pistas de música de alta calidad que puedes utilizar en tus proyectos sin tener que preocuparte por la infracción de derechos de autor. Las pistas de música están organizadas en categorías, por lo que es fácil encontrar la pista adecuada para su proyecto.
Uno de los aspectos más interesantes de Musicbed es que puedes obtener una vista previa de las canciones antes de descargarlas. Así podrás estar seguro de que la pieza que elijas es la adecuada para tu proyecto.
Otro punto fuerte de Musicbed es que las pistas de música son asequibles. Puedes comprar las descargas individualmente o suscribirte a la biblioteca y obtener acceso ilimitado a todas las pistas de música.
2 – BenSound
Benjamin Tissot, compositor y músico que vive en Francia, desarrolló este sitio de música gratuito. El sitio es un poco más activo que los demás, pero una vez allí, la navegación parece complicada. Pero no hay confusión en cuanto haces clic en él; en lugar de una palabrería o una explicación, accedemos inmediatamente a las piezas.
Bensound es un gran lugar para mojarse y experimentar lo que es ser sordo. Si tienes algo de tiempo y quieres empezar, este es el lugar para ti. Bensesound también ofrece acceso gratuito a ciertos títulos bajo una licencia Creative Commons, siempre que mencione Bensound.com para cualquier música utilizada en videos en línea, páginas web o animaciones.
Se puede comprar una licencia para Ben por 24 € por ruta, así como suscripciones anuales a partir de 129 € si no tienes suficiente crédito o simplemente necesitas un poco más.
3 – Lista de artistas
Artlist es una sofisticada plataforma de licencias de música para vídeos, películas y YouTube. Este sitio encantador y profesional presenta un estilo único que equilibra perfectamente una amplia variedad de interesantes canciones independientes. En realidad, esta es una lista de reproducción cuidadosamente seleccionada.
Artlist es una herramienta maravillosa para usar. Es fácil de aprender y brinda fácil acceso al trabajo de artistas emergentes según el estado de ánimo, el estilo del video o el género. Artlist también presenta artistas y álbumes que están actualmente en las noticias. También puede elegir canciones según la duración de la película o el tempo deseado.
Artlist ofrece una licencia completa e ilimitada por $199 por año (o $16,60 por mes) que brinda acceso a toda su colección, descargas ilimitadas, uso de por vida para cada proyecto (incluido el comercial) y toda su música ha sido verificada previamente para su monetización. en Youtube. ¡Somos grandes admiradores de Artlist, si no lo has notado!
4 – Ritmo Premium
PremiumBeat, filial de Shutterstock, se lanzó en 2012 para ayudar a las personas a encontrar música libre de derechos. Su sitio web es fácil de navegar, por lo que encontrar lo que buscas no debería ser un problema. Las canciones propias y libres de derechos de los expertos en música te brindan la sensación de éxito que esperas de las grandes productoras. Las melodías tienen derechos de autor y no son propiedad intelectual.
Lo que más nos gusta de PremiumBeat es que no está lleno de información y es bastante sencillo de navegar. Shutterstock brinda soporte para que usted sepa que está trabajando con una empresa confiable y de calidad. La licencia básica no comercial basada en la web cuesta 49 dólares al año, mientras que la licencia premium para hardware que genera ingresos cuesta 199 dólares al año.
5 – AudioJungla
AudioJungle es una biblioteca de sonido gratuita de alta calidad con más de 4000 muestras libres de derechos. Es uno de los bancos de sonido premium más asequibles, lo que lo hace ideal para cualquier proyecto. Sus servicios van desde largometrajes que requieren muchas pistas hasta vídeos de cultura corporativa que solo requieren una.
AudioJungle es un mercado que revisa y promueve las pistas de audio más populares, así como nuevos contribuyentes. Vende kits de música, efectos de sonido y códigos para músicos, así como una biblioteca de música en constante crecimiento (actualmente más de 525.000 canciones).
Si quieres aprender a vender música, este es el sitio que debes visitar. este banco de la música enfatiza la calidad en lugar sólo en cantidad y, por lo tanto, ofrece música que no encontrará en ningún otro lugar de Internet.
¿Qué es un banco de sonido y música libre de derechos?
Un banco de sonidos y música libre de derechos es una recopilación de sonidos, canciones y música que puedes utilizar sin tener que pagar derechos. Puedes usar estos sonidos y canciones de música en tus proyectos sin tener que preocuparte por la infracción de derechos de autor
Hay muchos tipos diferentes bancos de sonido y música Reino libre. Algunos son gratuitos, mientras que otros requieren una suscripción. La calidad de los sonidos y la música puede variar significativamente de una biblioteca a otra.
La mejor forma de encontrar la biblioteca de sonidos y música libres de derechos que se adapte a tus necesidades es escuchar varias muestras de cada biblioteca y comparar sus características.
¿Por qué acudir a estas plataformas?
La razón principal es que puede resultar muy costoso comprar u obtener una licencia para música y sonidos de fuentes tradicionales. Si estás trabajando en un proyecto con un presupuesto ajustado, utilizar sonidos y música libres de derechos puede ayudarte a ahorrar mucho dinero.
Otra ventaja de estos sonidos y La música es que puedes evitar problemas. de derechos de autor. Al utilizar fuentes tradicionales, hay que tener mucho cuidado de no infringir los derechos de autor. Este puede ser un proceso largo y estresante.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que no toda la música y los sonidos libres de derechos son iguales. Algunas bibliotecas pueden tener sonidos de menor calidad, mientras que otras pueden ser más caras.