¿Cuál es la diferencia entre un himno y un himno?
Cuando pensamos en el término «himno», nos vienen a la mente multitud de imágenes y sonidos: el Marsellesa prendiendo fuego a un estadio, Dios salve a la reina sentido profundamente por el pueblo británico, o incluso el himno europeo simbolizando la unión de los países miembros. Sin embargo, ¿nos hemos tomado alguna vez el tiempo para comprender realmente lo que significa esta palabra y, lo que es más importante, cuál es la diferencia entre un himno y un himno? Este es el fascinante viaje al que te invitamos hoy.
Resumen
¿Qué es un himno?
Para empezar, ¿qué es un himno? Según Larousse, un himno Es un “canto poético, a menudo de inspiración religiosa, que expresa un sentimiento de admiración, respeto, incluso veneración, hacia un ser, una cosa o un ideal”. Un himno también puede ser una canción de guerra como la Marsellesa, o una canción nacional como el himno francés o el himno nacional de otro país.
Al contrario de lo que podría pensarse, la himnos No son una invención del siglo XIX ni moderna. En realidad, tienen una historia mucho más antigua. El término «himno» proviene del griego «humnos» que significa «canto en honor a los dioses». El primer himno conocido es el Himno homérico a Apolo, que data del siglo VII a.C.
Pero entonces, ¿cuál es la diferencia con un himno? Empecemos con un pequeño viaje en el tiempo, para conocer el himno femenino.
Un himno: el canto sagrado de San Ambrosio
yohimno, en forma femenina, es una categoría específica de himnos. Los himnos religiosos, o himnos, nacieron en el siglo IV, bajo el liderazgo de San Ambrosio, obispo de Milán. Están destinadas a cantarse durante la Liturgia de las Horas, un conjunto de oraciones recitadas en momentos determinados del día por las comunidades monásticas.
Los himnos de San Ambrosio han marcado la historia de la música y la poesía cristianas. Se caracterizan por su ritmo regular, su rico simbolismo y su profundidad espiritual. Fueron ampliamente adoptados por la Iglesia católica e influyeron en muchos otros autores cristianos, incluido Santo Tomás de Aquino.
Cabe señalar que el género delhimno, en francés, ha variado a lo largo de los siglos. Originalmente, la palabra «himno» era masculina, como en griego y latín. Fue en el siglo XVII cuando la Academia francesa decidió feminizar el término, antes de volver a la versión masculina en el siglo XIX.
Himnos: entre música, poesía y política
Si elhimno y elhimno comparten la misma raíz y la misma función –la de expresar veneración, respeto o amor por un ser, una cosa o un ideal–, se diferencian en su contexto de uso y su contenido.
EL himnos nacionales, por ejemplo, son poderosos símbolos de identidad nacional. Expresan los valores, las aspiraciones y la historia de un país. Se cantan durante ceremonias oficiales, eventos deportivos o culturales y, a menudo, se asocian con momentos importantes de la historia nacional.
yohimno nacional francés, la Marsellesa, fue compuesta en 1792 por Rouget de Lisle, en plena Revolución Francesa. Su texto evoca la lucha por la libertad y la fraternidad, y su música, poderosa y pegadiza, ha recorrido el mundo.
Asimismo, elhimno nacional del reino unido, Dios salve a la reina (O rey), está lleno de historia y simbolismo. Compuesta en el siglo XVIII, expresa el amor del pueblo británico por su monarquía y su patria.
El himno europeo: símbolo de unión y fraternidad
Finalmente, para ilustrar la riqueza y diversidad de himnos, citemos el ejemplo dehimno europeo. Adoptado en 1985 por la Unión Europea, es el último movimiento de la Novena Sinfonía de Beethoven, la Oda a la Alegría. A diferencia de otros himnos, el himno europeo no tiene letra. Se trata de una pieza de música clásica que expresa, en palabras del propio Beethoven, «la idea de la hermandad del hombre».
Para concluir, celebramos la increíble riqueza de himnos y himnos. Ya sean masculinos o femeninos, religiosos o seculares, nacionales o internacionales, todos llevan un mensaje de esperanza, respeto y admiración. Son un reflejo de nuestra historia, nuestros valores y nuestras aspiraciones. Son el corazón palpitante de nuestra cultura y nuestra identidad. Así que la próxima vez que escuches el himno de tu país, tómate un momento para apreciar la profundidad de su mensaje y la belleza de su música. Y recuerda que un himno, o himno, es más que una simple canción: es un símbolo vivo que nos une y eleva.